Este 2022 está siendo un año de subibaja que empezaba con la recuperación tras dos años pandémicos y que la Guerra de Rusia contra Ucrania ha terminado de revolucionar. Ahora la inflación es nuestro pan de cada día con subida generalizada de precios y los costes que ello conlleva.
Por eso, la ineludible transformación digital es una necesidad que va más allá del uso tecnológico y que implica un cambio de mentalidad para la adaptación al mundo digital. La digitalización de las pequeñas y medianas empresas (pymes), que son el 99% del tejido empresarial de España, está dejando de ser una opción para ser el único camino. Esto, además, conlleva una serie de ventajas como:
- La automatización de procesos que implica una reducción de tiempo y costes.
- La creación de nuevas oportunidades de negocio.
- La mejora de la comunicación.
- Una mayor competitividad.
- La mejora del trabajo en equipo y también la autonomía de los mismos.
- Mejora de la experiencia del cliente.
El principal reto al que se enfrentan las pymes es la falta de formación e información relativa al desarrollo digital, especialmente aquella formación dirigida a sus profesionales. Actualmente la formación en competencias digitales, como la que ofrece Print2Print, es clave para poder transformar la información en conocimiento y así tomar mejores decisiones empresariales.
De hecho, estamos impulsando formaciones para mostrar los beneficios de las diferentes herramientas de digitalización en las empresas como la gestión documental para la digitalización de facturas, lanzar firmas electrónicas o la automatización de tareas:
- Dará lugar a equipos más cohesionados.
- Agilidad y simplicidad de los procesos administrativos.
- Desarrollo del talento.
- Y mejora de las conexiones de los diferentes departamentos.
La formación es una de las patas más importantes de la transformación digital de las empresas, que tiene dos vías: el reskilling (cambio de competencias) y el upskilling (mejora de las competencias).
Formarse en digitalización, teniendo en cuenta que la transformación digital del tejido empresarial, económico y social, debe ir acompañada de una transformación en las personas que lo conforman. Es decir, no sólo debe ser prioritaria la digitalización de la empresa, sino también aplicar un cambio de mentalidad en la forma de trabajar y relacionarse en los equipos.
Las pymes pueden aprovechar esta gran oportunidad para dar un paso de gigante hacia la transformación digital y descubrir todas sus ventajas.
